CÁNCER INFANTIL: LA NECESIDAD DE LA DETECCIÓN TEMPRANA EN PERSONAS VULNERABLES
El cáncer infantil es relativamente raro en comparación con los adultos, pero la detección temprana es fundamental. A nivel mundial, más de 400,000 niños son diagnosticados anualmente, con una tasa de supervivencia del 30% en países de bajos ingresos. América Latina y el Caribe registran altos índices de casos, con el cáncer como una de las principales causas de muerte en niños y adolescentes.
En Perú, se diagnostican aproximadamente 1553 casos al año, con una mayor incidencia en la zona nororiental. Las intervenciones educativas son clave para la detección temprana y la derivación rápida a centros especializados, aumentando las posibilidades de curación.
En ese marco, la Dirección Regional de Salud Puno a través del área de Estrategia Sanitaria Programa Presupuestal Cáncer en colaboración con la OPS y el Ministerio de Salud realizaron un curso sobre la detección temprana de cáncer en niños y niñas menores de 18 años que busca empoderar y capacitar al personal de salud de la Diresa y agentes comunitarios quienes tienen una labor fundamental de construir una comunidad saludable que contempla la participación de diversos aspectos de la vida.
Frente a esto, el Dr. Omar Reyes, mencionó que los casos más recurrentes en la región de Puno son leucemia linfática aguda y tumores de Wilkinson . Los principales síntomas en niños con cáncer incluyen moretones, sangrado constante por la nariz o la boca, palidez, dolores de cabeza intensos y persistentes, la aparición de bultos en zonas visibles, manchas blancas en los ojitos y desviación de los mismos. Además, el Dr. Reyes destacó que si un niño o niña presenta estos síntomas, es importante que acudan a su establecimiento de salud.
Para finalizar, la coordinadora de estrategias sanitarias del programa presupuestal cáncer de la Diresa Puno, Lic. Beatriz Nina Mamani, señaló que el objetivo de dicho evento es fortalecer y empoderar al personal de salud y agentes comunitarios, así como mejorar los conocimientos en la detección temprana de cáncer en niños menores de 18 años y lograr el reconocimiento de los signos y síntomas.